
Este ranchero no puede tumbar ni una vaca, se pasó toda la mañana tratando de tumbar a esta, pensamos que ya no lo iba a lograr pero en el último instante logro su cometido, pero vayamos que no fue nada fácil, así es el trabajo de uno que tiene rancho el de convivir dia a dia con los animales incluso a veces ellos suelen envestirte,
pero ya la costumbre de convivir con el peligro le hace a uno mas fuerte.